A mi marido, Till, le encantan las pizzas de masa a la piedra, así que para consentirlo me gusta preparárselas en casa un día a la semana. Casi siempre las hago con salame o jamón, que es lo que más le gusta a él, y este domingo preparé esta de jamón.
La masa queda crujiente y fina, tal como una verdadera pizza de Nápoles 🙂 Lo mejor es que es facilísima de hacer y está lista en media hora! Aquí abajo les dejo la receta.
Ingredientes:
Espumado
– 1/2 cdta. de levadura en polvo
– 1/2 cdta. de azúcar
– 1/4 de agua tibia
Masa
– 1 taza de harina blanca sin polvos de hornear
– 1 cdta. de sal
– 1/2 cdta. de azúcar
– 1 1/2 cda. de aceite de oliva extra virgen
– 1/2 taza de agua tibia
Preparación:
Espumado
Añade en un taza pequeña la levadura, el azúcar y el agua tibia, revuelve con cuidado y deja reposar unos 10 minutos. La idea es que la levadura haga espuma.
Masa
Mezcla los ingredientes secos, haz un espacio en el medio, como si fuese un volcán, y vierte en el espacio primero el aceite y luego el agua. Mezcla todo y cuando esté bien incorporado añade el espumado. Mezcla todo otra vez y amasa hasta obtener una masa elástica, pero consistente. Haz con ella una bola.
Finalmente, unta la lata del horno con aceite de oliva y ve estirando sobre ella la masa en forma de circunferencia. Ten cuidado de estirar con los dedos en donde notes la masa más gordita y de rellenar en donde la veas a punto de cortarse. Una vez tengas la forma deseada, más o menos una circunferencia de 35 cms. de diámetro, ponla en el horno previamente calentado a 200 grados. Déjala ahí, más o menos, 10 minutos y voltéala si es necesario.
Una vez esté lista, lo notarás por el aspecto dorado, retírala del horno, embetúnala con salsa de tomates, ojalá natural, y ponle encima lo que más te guste, 15 minutos más al horno y voilà!!!
Bon Appetit…
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